Beisbol de Puerto Rico

Es inexplicable que una liga que fue poderosa y que dio tamto talento esté e punto de desaparecer definitivamente.
que pasará con la Serie del Caribe si esto ocurre definitivamente?? Se habla de la entrada de Colombia en 2010, pero antes de eso tenemos unas series mas por disputar.
Debemos las demás ligas del Caribe poner nuestras barbas en remojo??
Saludos

No hay liga
La vejez y la desvergüenza acabaron con el torneo invernal de Puerto Rico

Cuando se confirmó la cancelación del torneo profesional de béisbol de Puerto Rico, una veterana colega de la isla me escribió alarmada: "¡No habrá pelota invernal! Los viejitos que se encargan de las ligas y equipos deportivos en P.R. son unos sinvergüenzas".



El béisbol es un espectáculo deportivo de grandes masas de seguidores en Puerto Rico. Así ha sido por décadas. El registro histórico de la liga profesional de béisbol invernal lo constata. Y el talento de peloteros puertorriqueños en Grandes Ligas demuestra su persistencia cultural.



El presente cierre patronal de la Liga de Béisbol Profesional de Puerto Rico ha provocado un merecido diluvio de críticas en contra de los administradores.



No hay pelota invernal boricua. ¿Y quién sabe si la "habrá" en el futuro? Yo no sé si el fracaso se debe a que los organizadores son "viejitos" y/o porque son "unos sinvergüenzas". Lo que sí sé es que, como comentaba la compañera, se acabó el béisbol.



Pensé hacer una analogía de la desaparición de la liga boricua con la ridícula zozobra del Titanic, pero resultaría en hipérbole. Más bien, la liga flotó a la deriva por varios años como un inmenso témpano de hielo hacia aguas templadas que finalmente se la tragaron.


AP

Alex Cintrón es uno de los ligamayoristas que no deja de jugar en PR
La letanía de quejas de los organizadores y los dueños de franquicia apunta hacia un ultraje de tiburones carnívoros descontrolados como: "los jugadores de Grandes Ligas no quieren jugar"; "la economía está mala"; "la visita de los Expos de Montreal cambió el panorama"; y "los aficionados no van a los parques".


Pamplinas. El béisbol de Puerto Rico desapareció porque los organizadores no tomaron las medidas necesarias para reformarlo en un nuevo producto del mundo del espectáculo.



Estos "viejitos" son viejitos de espíritu, sobretodo, viejitos incapaces para la implantación de las nuevas demandas del mercado. Son viejitos como aquel senador de Alaska que alguna vez elucubraba acerca de la tecnología virtual.



"La internet no es algo a lo que tú simplemente le viertes algo encima. No es una camioneta grande. Es una serie de tubos", dijo entonces el ilustre Ted Stevens.



Una de las fallas evidentes de la liga boricua era (y es) su pobre explotación del recurso internet, cuyo costo de producción es ínfimo y cuyo rendimiento informático es masivo e inmediato. Repito, ésta es una falla evidente, pero hay muchas otras deficiencias entre las nuevas tendencias probadas igualmente desconcertantes.



Estos "sinvergüenzas" son sinvergüenzas de salón, sobretodo, sinvergüenzas adeptos del filete y el caviar, que se lo comen todo menos los vegetales. Son sinvergüenzas que luego sufren un ataque al corazón y después se lo atribuyen a que no había palillos de diente en la mesa.



La liga viejita y sinvergüenza de Puerto Rico murió. Los cientos de miles de aficionados del béisbol del Caribe esperamos un renacimiento. Sólo se logrará con vergüenza (definición: pundonor, amor propio) y juventud (definición: energía, vigor, tersura )